Carlos Alberto Román Ochoa, el sucesor de un sueño llamado Girón
El pago de una deuda social
Durante muchos años los habitantes del Barrio La Victoria en la ciudad de Bucaramanga, vieron caminar por sus calles a miles de niños gironeses llevados de la mano por sus padres para ver los alumbrados de navidad, ya que en Girón lo único que se podía ver en diciembre era el alumbrado público.
Por eso me llena de alegría el poder escribir estas letras mientras observo a los niños de ese barrio bumangues, recorrer ahora el alumbrado navideño del pueblito colonial, con lo cual su alcalde John Abiud Ramírez Barrientos, puede irse tranquilo sabiendo que la historia le reconocerá el haberle pagado a la sociedad una deuda de inclusión social que se tenía desde hace más de treinta años. Hoy Girón es un municipio que sirve como ejemplo de gestión y compromiso público en el Departamento, porque pasó de estar en las estadísticas de la administración pública, a vivir su propia existencia como ciudad poniéndose el ropaje del progreso y la dignificación.
Hoy en día los gironeses son conscientes de la importancia de su territorio, de su futuro como sociedad, y sobre todo, del gran esfuerzo que hizo su actual administración para demostrar que cuando se sueña se puede. Y ese es precisamente el reto que le espera a Carlos Alberto Román Ochoa: continuar con un sueño llamado Girón
El camino a seguir
El camino no será fácil, y por ello tendrá que enfocarse desde el primer día de su gobierno en fortalecer los niveles de recaudo y control del gasto para evitar el riesgo en el incumplimiento de futuras obligaciones contractuales, sin dejar de tener en cuenta la necesidad de disminuir el indicador de sostenibilidad, que es en últimas lo que le dará a su mandato la capacidad de inversión y la autonomía de endeudamiento, para poder continuar con el nivel de progreso en materia de infraestructura que le deja su predecesor.
El crecimiento de Girón no puede parar, y por eso será necesaria la expedición de un nuevo POT que contenga una reglamentación seria para los constructores de la región, y acabar así con la fiesta de circulares al interior de la Secretaría de Planeación, la cual fue muy bien aprovechada por los urbanizadores piratas amigos del ex secretario de planeación Oscar Alberto León Chacón, a quien espero que el concejo municipal le sepa investigar todas las licencias ilegales que expidió a escondidas para favorecer sus propios intereses personales.
Tareas inaplazables
De la misma forma, tendrá que encaminar sus esfuerzos a liderar un proceso constructivo de forma organizada en el embalse de Topocoro para que dicha zona no termine convirtiéndose en una tragedia ambiental de grandes proporciones. La pavimentación de las calles del sector industrial debe ser una prioridad si se quiere avanzar en materia de competitividad, y para ello podrá utilizar el mecanismo administrativo de obras por impuestos, no sin antes revisar la propiedad de esos terrenos para aplicar sin temor las respectivas declaratorias de utilidad pública. El área metropolitana espera la consolidación efectiva del parque de Palogordo ubicado entre el anillo vial externo y la transversal de Ruitoque Alto como el lugar más importante de recreación pasiva en el municipio. Es mucho lo que hay por hacer, pero estoy seguro que con disciplina y dedicación va a ser capaz de lograrlo. Buena suerte señor Alcalde.
Próxima columna: Mario José Carvajal, la esperanza de Piedecuesta.